La familia fougère se caracteriza por su sensualidad limpia y energética, gracias a la inclusión de ingredientes aromáticos como la albahaca, la salvia y el romero. Si bien la extracción directa de frutas debido a su alto contenido en agua es limitada, se recrean sus aromas a través de moléculas, permitiendo una amplia gama de texturas, desde notas aterciopeladas y jugosas hasta secas o acuosas, enriqueciendo la composición general.