Cassandra

"Cassandra es un viaje sensorial. La frescura de la bergamota y el jazmín se entrelazan con la dulzura de la miel, evocando un jardín en plena floración. El toque terroso del pachulí y el sándalo añade profundidad, mientras que el ámbar y la vainilla envuelven como un abrazo cálido. Es un perfume que habla de elegancia y misterio, ideal para una noche mágica."

"Cassandra es un viaje olfativo que evoca la elegancia de una tarde de verano. Al abrirse, la frescura de la bergamota y el limón se entrelaza con la dulzura de la miel, creando una danza vibrante. El corazón floral, donde el jazmín y la rosa se encuentran, recuerda a un jardín en plena floración, mientras que el geranio añade un toque de sofisticación. La base, rica en sándalo, vainilla y un toque de algalia, aporta una profundidad cautivadora. Esta fragancia, como un poema de amor, se queda en la piel y en la memoria, recordándonos la belleza efímera de la vida."

"Cassandra es un viaje sensorial que comienza con la frescura vibrante de la bergamota y el limón, evocando un amanecer en un jardín florido. A medida que se despliega, el jazmín y la rosa aportan un romanticismo profundo, mientras que la lavanda añade un toque de serenidad. La base de algalia, sándalo y vainilla envuelve la piel en una calidez envolvente, reminiscentes de la elegancia de una noche estrellada. Esta fragancia, lanzada en 1935, es un clásico que rivaliza con Joy de Jean Patou en su sofisticación. Es un abrazo de nostalgia y modernidad."

"Cassandra es un viaje olfativo que evoca la elegancia de épocas pasadas. La frescura de la bergamota y el limón se entrelazan con la suavidad del jazmín y la miel, creando una experiencia dulce y envolvente. Al fondo, el sándalo y el ámbar aportan una calidez que recuerda a un abrazo familiar. Ideal para quienes aman la sofisticación de fragancias como Chanel No. 5."

"Cassandra es una sinfonía olfativa que despierta los sentidos. Desde la primera inhalación, la frescura de la bergamota y el limón se entrelaza con la suavidad de la lavanda y el jazmín, creando un halo luminoso. A medida que evoluciona, el corazón floral se enriquece con la dulzura de la miel y la rosa, mientras que el fondo de sándalo, musgo de roble y resinas aporta profundidad y calidez. Es un viaje sensorial que recuerda a los grandes clásicos como Chanel No. 5, pero con un toque audaz y misterioso. Una obra maestra de 1935 que sigue cautivando."